Cinco lecciones del Principito que te enseñarán a amar Lecciones invaluables que podemos aprender desde niños.

Amar no es fácil. Mucho aprendemos del amor a lo largo de nuestra vida y las contradicciones son infinitas. Desde los días adolescentes en los que creemos que si una persona fijó su vista en nosotros ya se trata de amor, hasta el dolor de la decepción cuando la persona que amamos decide irse.

Cada batalla, cada pérdida y cada decepción nos enseña valiosas lecciones acerca de uno de los sentimientos más complejos de la humanidad. Todos se creen aptos para hablar de amor y es que todos, en alguna medida, lo hemos vivido.

Sin embargo, hay reconocidas lecciones que surgen de los lugares más inesperados, como lo puede ser un libro para niños.

“El Principito” es más que un libro infantil de mediados del siglo XX. Es una guía para aprender a amar a otros y a uno mismo.

La historia de un piloto, una rosa, un zorro y el Principito nos enseñan grandes lecciones de vida, pero sobre todo de amor.

-NO JUZGUES A LA GENTE POR SU PASADO

“Es una locura odiar a todas las rosas sólo porque una te pinchó. Renunciar a todos tus sueños sólo porque uno de ellos no se cumplió.”   

A veces nos lastiman de tantas formas que puede llegar la persona indicada y la evitamos sólo por el dolor que alguien más nos provocó. No podemos dejar que el pasado ciegue nuestra esperanza sobre el futuro. Cada persona es distinta y cada una tiene intenciones y reacciones distintas.

-EL AMOR ES LO MÁS IMPORTANTE

“He aquí mi secreto, que no puede ser más simple: solo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible a los ojos”.   

Tal vez la frase más famosa del libro. En verdad lo esencial es invisible a los ojos. Desde el amor que alguien inesperado hace crecer en nosotros hasta el apego que tenemos a las cosas materiales. Siempre dependemos de nuestros ojos, pero necesitamos mucha sabiduría para entender que lo que es realmente valioso es lo que el corazón dicta.

-DEBES RESPETAR LA LIBERTAD DE LAS PERSONAS QUE AMAS

“Pero si tú me domesticas, entonces tendremos necesidad el uno del otro. Para mí, tú serás único en el mundo. Para ti, yo seré único en el mundo».   

Sería bueno decir que es de jóvenes querer poseer a las personas que aman. Lamentablemente hay mucha gente mayor que sólo quiere poseer y tristemente se pierde así de la verdadera dicha del amor, la libertad.

Si alguien está contigo es por convicción y amor, no debe estar bajo condiciones, chantajes, miedo o necesidad. De la libertad nace el amor y es ahí donde mejor se manifiesta.

-VALORA EL TIEMPO QUE VIVISTE CON ALGUIEN AUNQUE SE HAYA IDO

“Fue el tiempo que pasaste con tu rosa lo que la hizo tan importante».   

Una relación está llena de altibajos y muchas veces amaremos a gente que se irá de nuestra vida. No debemos guardar rencor por lo que nos hicieron, por los malos momentos que a veces parecen pesar más que los buenos.

Lo mejor es vivir con un recuerdo bueno de esa persona, las cosas que valieron la pena y lo que los llevó a juntarse y permanecer tanto tiempo juntos. Ya no es tu presente, no dejes que eso arruine tu pasado.

-CADA PERSONA PUEDE SER LA MÁS ESPECIAL DE TU VIDA

“No era más que un zorro semejante a cien mil otros. Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo».   

Encontrar a la persona indicada es un proceso lento y difícil, pero es cuando dejas de buscar que encuentras a la persona indicada. Lo mejor de todo, después de miles de historias de amores imposibles y únicos, te das cuenta que el amor nace si se le permite, por lo que a veces la persona indicada ha estado cerca de ti toda la vida.

Con poco más de 100 páginas, “El principito” ha llegado a convertirse en una guía indiscutible de lecciones de vida, amor y razón. Su legado vive mucho más allá de lo que creó Antoine de Saint-Exupéry y gracias a él millones de personas en todo el mundo han encontrado el verdadero amor, en otros y en sí mismo.