Cuando estamos dejando atrás nuestros 20 años, la barrera de los 30 parece ser dura, parece que la vida nos está llevando directa y rápidamente hacia el precipicio de la vida adulta. Llegar a los 30 significa crecer, pero crecer en serio (no como cuando cumplimos 20): es madurar, mantenerse firme y enfrentarse por completo a la independencia.
En estas sociedades bastante obtusas llegar a los 30 soltera, sin hijos y con un trabajo divertido suena a pecado.
Hoy en día, los límites de edad para hacer cosas se han desdibujado; así es que personas de 80 años corren maratones o parejas de 50 deciden volver a creer en el amor. Sin embargo, los 30 años siempre fueron un fantástico momento del hombre, porque es la edad en la que tienes la energía para hacer lo que te gusta y el dinero para cumplirlo.
Así que si estás por alcanzar esa edad, no temas, lo mejor está por venir y estas son las razones:
1- Miras la realidad con otros ojos
Cuando rozas los 30 comienzas a darte cuenta que la belleza no está únicamente en lo visible. Te das cuenta de que el amor no es tan ideal como lo pintan, de que los amigos no siempre son para siempre y la familia es lo más bonito que pensaste que podías tener.
Ya tus ojos no ven con inocencia al mundo, ahora actúas según lo que has aprendido.
2- Aprendiste de qué se trata el amor propio
Has entendido quién eres y tienes alguna idea sobre lo que quieres en la vida.Esta te ha regalado tantos tropezones que ya sabes qué quieres tolerar y qué no, ya no le tienes miedo a ser diferente, eres quien quieres ser y no lo que los demás están esperando. Los 30 te han enseñado que lo primero que debes hacer es amarte por encima de todo y que tú eres tu prioridad.
3- Estás más centrado y orientado
Has pasado por altibajos laborales, por estrés universitario, por problema familiares, diferencias con amigos y separaciones amorosas. Esto te ha enseñado qué es lo que quieres para tu vida, cuáles son tus metas y objetivos (tanto financieros como personales).
4- Eres mejor en las relaciones
Cuando estas cerca de los 30 sucede algo grandioso, te das cuenta de que no todo se trata de ti. Encuentras un balance entre la vida ajena y tu vida, te conviertes en mejor amiga, mejor hija, mejor mamá y mejor pareja.
5- Eres una mujer completa
A lo largo de tu vida, pasaste por muchas cosas que te han enseñado a madurar. Ahora ves tus problemas desde otro lugar, ya no todo es el fin del mundo. Eliges a tus amigos, eliges dónde quieres estar y cómo quieres ser tratado. La rutina y tú ya no son enemigos, aprendiste que será parte de tu vida y eso está bien. Ya la idea de hacer lo mismo todos los días de tu vida no te causa tanto terror.
6- Tienes experiencia
La vida te enseñó a tropezar y a levantarte cada vez con más fuerza, de modo que tienes capacidad para enfrentarte a la vida.
7- Vives tu vida como se te da la gana
A los 30 años después de haber pasado por malas experiencias te vuelves más selectivo con tus decisiones. Los riesgos que decides tomar serán porque los has calculado. Las decisiones que a los 20 parecían no ser simples a los 30 se ven con mucha más claridad.
Los 30 años son una etapa increíble, es necesario que lo vivas sin culpas ni presiones. La vida está para ser disfrutada, no hay que desperdiciar el tiempo.